miércoles, 2 de noviembre de 2016

Juegos de Infancia

Uno de los juegos más entrañables que vienen a mi memoria y que ya representaban parte de lo que ahora soy, son todos los que jugaba con mi prima en las vacaciones de verano en el pueblo. 
Y digo bien, sí, juegos en general, porque cada día era una aventura: nos disfrazábamos, nos poníamos pelucas, bigotes... Utilizábamos cualquier zapato o prenda de ropa que estuviera olvidada en el armario y el baúl del desván de mi abuela...Era increíble, la imaginación desbordante que teníamos las dos juntas, llegamos incluso a decorar el desván dependiendo de la temática del juego que habíamos destinado para ese día. 



Hemos sido piratas, dependientes en unos grandes almacenes, dueñas de tiendas de ultramarinos, princesas, azafatas de vuelo, médicos, deportistas, maestras, pilotos de avión...Cada día una parafernalia para llevarlo a cabo, y por supuesto no estábamos solas, nos ayudaban las amigas, pero cuando ya lo teníamos todo dispuesto, y ¡no todas estaban dispuestas a pintarse un mostacho de bucanero!